Durante la primera mitad de esta año, el Museo de Arte Leeum organizó una exposición dedicada exclusivamente a la cerámica: Joseon White Porcelain, Paragon of Virtue. Esta muestra ofreció una novedosa percepción de la porcelana blanca como encarnación física del gunja, un ser que representaba los valores y principios ideales que el pueblo de Joseon aspiraba a alcanzar
La porcelana como representación del “gunja”
Texto del Museo Leeum, editado por Wladimir Vivas
La exposición se dividió en cuatro partes, que nos ayudan a entender los diferentes estilos cerámicos, relacionándolos con la tradición coreana. Al reunir esta deslumbrante variedad de porcelanas blancas de Joseon procedentes de todo el mundo, que van desde los tesoros cerámicos de mayor calidad hasta objetos domésticos de uso cotidiano, la exposición pretende mostrar cómo estas diversas vasijas personifican los principios fundamentales de la sociedad de Joseon.
1. La cumbre de la porcelana blanca de Joseon
La primera sección de la muestra recoge algunos de los mejores ejemplos de porcelana blanca producidos durante los 500 años de historia de la dinastía Joseon. Las obras expuestas incluyen porcelanas azules y blancas, porcelanas blancas monocromas y porcelanas blancas con esmalte de hierro marrón y esmalte de cobre rojo, junto con una amplia selección de otras obras importantes, desde porcelanas blancas incrustadas de la primera época hasta porcelanas blancas pintadas de la última. Hasta la fecha, el gobierno coreano ha designado oficialmente un total de 59 porcelanas de Joseon como tesoros culturales (18 Tesoros Nacionales y 41 Tesoros); sorprendentemente, esta exposición presenta 31 de ellas (10 Tesoros Nacionales y 21 Tesoros), más de la mitad del total. Por tanto, esta sección ofrece la oportunidad única de contemplar simultáneamente una multitud de obras maestras que representan la cumbre de la porcelana blanca de Joseon.
2. Porcelana azul y blanca
“Agunja se cultiva a sí mismo con sinceridad y seriedad. Se cultiva a sí mismo consolando a los demás. Se cultiva a sí mismo consolando a todos”.
De la sección “Xian Wen” de Analectas de Confucio
Dignidad y decoro
A principios del periodo Joseon, las porcelanas azules y blancas, pintadas con cobalto, estaban reservadas exclusivamente a la corte real, por lo que se producían en los hornos oficiales de Gwangju, provincia de Gyeonggi-do, cerca de la capital. Dado que reflejaba la dignidad y autoridad de la corte real, esta porcelana tendía a ser bastante conservadora y se caracterizaba por la elegancia de sus formas y diseños. A finales del periodo Joseon, la porcelana azul y blanca se había hecho más accesible al público y empezaba a expresar los principios neoconfucianos y la conciencia de los literatos de Joseon, representando su voluntad de convertirse en un gunja a través de un riguroso autoaprendizaje.
“Un gunja debe cambiar rápidamente en caso de error, como un leopardo cambia sus manchas para volverse más espléndido”.
De la sección “Ge Gua” del Libro de los Cambios
Cambio e innovación
Como un gunja la porcelana azul y blanca, icono de la dignidad y el decoro, también demostró estar abierta al cambio. A finales del periodo Joseon, aparecieron muchas características decorativas innovadoras, como el uso de múltiples pigmentos y la introducción de nuevos motivos. Pero incluso en medio de estos profundos cambios, la porcelana azul y blanca de Joseon nunca renunció a su refinada estética ni a su condición fundamental de encarnación de los valores neoconfucianos.
3. Porcelana blanca con bajocubierta marrón de hierro y bajocubierta rojo de cobre
“Un gunja permanece firme incluso en la pobreza, mientras que una persona mezquina en la pobreza cede a sus bajos deseos”.
de la sección “Wei Ling Gong” de las Analectas de Confucio
Hornos oficiales: Una nueva dignidad
Tras las devastadoras invasiones de Japón y China, la sociedad de Joseon sufrió grandes dificultades a finales del siglo XVI y durante el XVII. Estas condiciones afectaron directamente a la producción de porcelana blanca. Por ejemplo, dado que el costoso pigmento azul cobalto se hizo muy difícil de adquirir, los hornos oficiales empezaron a utilizar óxido de hierro para pintar los mismos motivos decorativos que antes se pintaban con azul cobalto. Sin embargo, los diseños resultantes muestran el poder y la belleza únicos del pigmento de óxido de hierro, que proviene de la sorprendente intensidad y la sutil fluctuación de los colores. Esta fascinante fase ejemplifica cómo la porcelana blanca de Joseon se mantuvo “firme incluso en la pobreza”, que es lo que le permitió florecer de nuevo, como una gunja.
Hornos regionales: El humor en la porcelana blanca
La percepción generalizada es que la porcelana blanca de Joseon es solemne, elegante y refinada; sin embargo, los hornos regionales de todo el país también produjeron muchas porcelanas blancas con diseños únicos y humorísticos pintados en marrón o rojo. Esta decoración se empezó a utilizar en el siglo XVII, mientras que las porcelanas blancas con diseños pintados únicamente con pigmento rojo cobrizo aparecieron a finales del siglo XVIII y principios del XIX. Recordando el legado de la loza buncheong (que antes se producía en hornos regionales), estas cerámicas destilaban humor, sinceridad e individualidad, lo que las hizo muy populares en aquella época.
4. Porcelana blanca monocroma
“Esta copa de vino vacía es clara e inmaculada, pero una vez llena de vino, aparecen muchas manchas y partículas. Del mismo modo, las personas que son totalmente justas e íntegras no toleran lo que no es justo”
de los Anales del rey Seongjong (vol. 260, séptimo día del duodécimo mes, 1491).
Hornos oficiales: Color condensado
Las porcelanas blancas monocromas de los hornos oficiales, uniformemente recubiertas de un vidriado transparente. revelan una mente no contaminada por la codicia o el deseo. De hecho, su hermoso color blanco fluctuaba continuamente con el paso del tiempo, desde un claro blanco “níveo” a un blanco “lechoso”, más cremoso; o desde un blanco grisáceo a un blanco con un brillo azulado, que recuerda al jade. Elaborada por maestros ceramistas según la estética sobria de la dignidad y el decoro, la porcelana blanca monocroma es austera pero rebosante de energía, realizada para un ambiente imponente pero infinitamente generoso.
Hornos regionales: Expandiendo el color
Los hornos regionales producían principalmente vasijas de porcelana blanca para uso cotidiano. Aunque sus formas son muy similares a las de los hornos oficiales, son mucho menos precisas y refinadas. Además, su color suele ser más grisáceo o pardo, incapaz de igualar el blanco puro de las vasijas de los hornos oficiales. Sin embargo, desde una perspectiva contemporánea, la supuesta distorsión y decoloración de las porcelanas blancas regionales tiene en realidad un atractivo especial. Al carecer de pureza o brillo, su apariencia humilde o incluso tosca transmite en realidad una clara sensación de calidez y afecto. Los colores de la tierra, las superficies rugosas y las formas básicas se corresponden bien entre sí, dando a estas vasijas un aspecto orgánico y pragmático que nos incita a utilizarlas en nuestra vida cotidiana, incluso hoy en día.
Todas las fotos cortesía del Museo de Arte Leeum. Infocerámica agradece a Museo de Arte Leeum la ayuda prestada para la realización de este artículo
LEEUM
60-16, Itaewon-ro 55-gil
Yongsan-gu, Seoul 04348 – Corea del Sur
Web: www.leeumhoam.org
Si quieres seguir leyendo artículos como este, apóyanos haciéndote socio de Infocerámica