Lucie Rie en la Galería Oxford

by Infocerámica 11 de diciembre de 2022

11 de diciembre de 2022

Hasta el 7 de enero se puede visitar en la Galería Oxford la exposición “Lucie Rie”, que celebra la obra y el legado de esta ceramista, una de las más influyentes del siglo XX

“Lucie Rie”

“Cada nueva obra es un nuevo comienzo. Nunca dejaré de ser una alumna” – Lucie Rie

La Galería de Cerámica Oxford presentó esta exposición el pasado 12 de noviembre, centrada en una figura seminal cuya estética sin pretensiones pero rigurosa y su espíritu pionero siguen configurando hoy el panorama de la cerámica moderna.

Alumna de Josef Hoffmann, Lucie Rie (1902–1995), se formó como ceramista en el ambiente vanguardista de las Werkstätte vienesas. Cuando se vio obligada a huir en 1938, llevó al Reino Unido la inconfundible estética del modernismo europeo. Su obra, dedicada sin reservas a las formas funcionales, revela sus bien temperadas habilidades al torno y un profundo conocimiento de la química de la arcilla y los esmaltes. En palabras de Sir David Attenborough: “Incluso con esta restricción y disciplina, consiguió producir una serie continua de nuevas formas y superficies. Sin embargo, todo lo que creaba es inmediatamente reconocible como salido de sus manos”.

Las obras presentadas proceden de colecciones privadas y abarcan toda la extensa y prolífica carrera de Lucie Rie, Incluyendo un juego té de los años 50, realizado en gres; un jarrón estriado y un cuenco blanco con borde de bronce de los años 70, así como ejemplos de algunas de sus últimas icónicas piezas, como sus características botellas de gres con esmalte volcánico, labio acampanado y decoración en espiral.

Su obra ha sido una presencia constante en el programa de la Galería de Cerámica de Oxford. James Fordham comenta: “He tenido la suerte de ver y manipular toda una serie de obras de Lucie Rie, desde las primeras vajillas esgrafiadas hasta las formas acampanadas y fluidas de las botellas de los últimos años de su carrera. Mi fascinación se ha mantenido y profundizado. Es difícil expresar con palabras lo que tanto me gusta y admiro de su obra. Por ejemplo, cómo su dibujo esgrafiado abre el espacio dentro y alrededor de los cuencos o cómo las gotas de manganeso/bronce se deslizan por la superficie de un esmalte blanco. Su dominio de los esmaltes le permite utilizar combinaciones de colores bellas e inesperadas, que me hacen entrar en su mundo y (sobre todo en las obras amarillas) parecen reflejar toda la historia de los refinados pero íntimos objetos de cerámica”.

James Fordham