Las piezas del ceramista británico Nicholas Lees no dejan nunca indiferentes, ya que unen una excelencia técnica prodigiosa con una estética y, en ocasiones, puesta en escena, tan delicada como poética
El mismo artista ofrece un ejemplo de la forma en que en ocasiones se encuentra la técnica adecuada: “La introducción del color en mis esculturas se inspiró en mis trabajos de tinta sobre papel. Empecé a experimentar con sales metálicas solubles para colorear la cerámica en lugar de trabajar, por ejemplo, con esmaltes y óxidos. Esta es una técnica inusual, con la que trataba de imitar la forma en que la tinta empapa el papel. Descubrí que si trabajaba con una solución de sulfato de cobalto aplicada al interior de la escultura bizcochada, y luego la saturaba con agua, mientras la escultura se secaba, el color se movía a través de la escultura. y me concentré en los bordes de las ‘aletas’ que había creado usando el torno. El cobalto se movió hacia los bordes de la escultura debido a la succión causada por una evaporación más rápida de esos bordes.”
Foto: Composición con piezas de la serie “Floating bowl”, presentadas por la galería Cavaliero Finn. Foto enviada por la galería Cavaleiro Finn.
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Mensaje de Wladimir Vivas:
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Wladimir Vivas
Director de Infocerámica