Su Xianzhong. “Paper No.1”, 2017. 19 ×23 × 27 cm (©Ting-Ying). V&A Museum, Londres.
Ana Quintero-Pérez nos ofrece sus experiencias viajando por China y visitando centros cerámicos por todo el país, desde la tradición a la cerámica copntemporánea, así como los centros arqueológicos y los hornos tradicionales
La cerámica en China hoy: deambulaciones
Ana Quintero-Pérez
En estos últimos meses, China se ha encontrado en primera plana de todos los medios de comunicación, aunque tristemente, no haya sido por su cerámica. Tuve la suerte de visitar este sorprendente país a finales del 2019, antes de que surgiera la crisis mundial actual. Organizamos un viaje privado de casi tres semanas con el objetivo de visitar los principales centros de producción de cerámica. Éramos cuatro colegas historiadoras del arte del Museo Ariana –entre las cuales, una rubia de ojos azules y una mulata de cabellos crespos– y dónde fuéramos no dejábamos de sorprender a los habitantes del Imperio del Medio que se nos acercaban con curiosidad, nos saludaban sonriendo o incluso se hacían selfies con nosotras.
Fuimos siempre acogidas con mucha simpatía y recibidas con la tradicional y convival preparación del té “gon fu cha” (literalmente “arte del té”). Tal vez fue ese nuestro primer contacto con la cerámica China, a menos que haya sido en algún restaurante popular dónde los vasos de cristal y la vajilla en porcelana vienen herméticamente sellados en celofán y se abren con los palitos chinos. La increíble diversidad de la gastronomía china iguala a la de su cerámica, ambas omnipresentes en aquel país continente, para nuestra gran felicidad.
¡Incluso las papeleras son de porcelana!
En la arquitectura de los templos, la cerámica colorida está presente, sobre todo en los techos rematados por esculturas de animales protectores.
Dehua y los blanc de Chine
Nuestro periplo comenzó en Dehua en la provincia de Fujian, sitio dónde históricamente se producen los famosos blanc de Chine (porcelana blanca generalmente sin ornamentos pintados) desde la dinastía Ming (1368-1644). Varios museos de cerámica como el Dehua Ceramics Museum presentan estatuas budistas de Guanyin (bodhisattva de la compasión venerado en el budismo) y de guerreros, pero también vajillas y finas flores en porcelana, mayormente contemporáneas. Semejante manera de presentar las obras sería inimaginable en Europa, pero allá, la infinita multitud de vitrinas y objetos suele ser muy común.
Dehua Ceramics Museum
Diseñadores como Ting & Ying se han instalado en Dehua para producir, junto con talentosos ceramistas locales, asombrosas creaciones que se presentan en ferias internacionales como la COLLECT de Londres y se exponen en el Victoria & Albert Museum de la capital inglesa.
Cerámica de Su Xianzhong
Uno de estas artistas es Su Xianzhong (1968) cuyo taller reúne esculturas abstractas compuestas de hojas de porcelana infinitamente finas, como el papel, que contrastan con sus obras eróticas. Arriba, en el segundo piso del espacio de exposición, se encuentran obras de su padre (el “maestro”); en el primer piso, sus propias creaciones y en la planta baja, las de sus alumnos, o más bien “discípulos”. A lo largo del viaje, volvimos a encontrar esta jerarquía que nos sorprendió tanto como el inmenso respeto hacia los maestros ceramistas y la increíble humildad de los discípulos que se forman copiando la obra de su mentor durante años, antes de liberarse para crear su estilo propio. Aunque no siempre es el caso, es común que la técnica se trasmita entre generaciones, de padres a hijos e hijas.
Los impresionantes hornos dragón o “long yao”, construidos siguiendo la inclinación pronunciada del terreno, llegaron a alcanzar un centenar de metros en el punto culminante de la producción de cerámica en China.
Los celadones de Longquan
En Longquan (provincia de Zhejiang), visitamos un gigantesco nuevo museo, el Longquan Celadon Ware Museum, Longquan y varios talleres que producen los famosos celadones (ver mi artículo Celadones intemporales en Infocerámica) como el de Lu Weisun (1962)
La escuela de arte de Hangzhou
En Hangzhou (provincia de Zhejiang) pudimos visitar la Academia de Arte de China. Profesores chinos y europeos enseñan a los alumnos las técnicas de la cerámica en un fabuloso campus con edificios y pabellones diseñados por arquitectos famosos internacionalmente, como el Museo de diseño del portugués Álvaro Siza o el Museo de Arte Folclórico (Folk Art Museum) del japonés Kengo Kuma, entre otros. Algunas obras del pintor y ceramista chino Bai Ming (1965) estaban expuestas allí. Una exposición retrospectiva de su obra fue recientemente expuesta en Keramis, centro de la cerámica en La Louviere, Bélgica.
Jingdezhen, cuna mundial de la porcelana
La porcelana se inventó en China y el secreto de su fabricación tardó más de mil años en llegar a Europa donde la primera manufactura abrió en Meissen, Alemania, a principios del siglo XVIII. El Museo Ariana en Ginebra expone actualmente colecciones suizas privadas de porcelana de Meissen.
En Jingdezhen, cuna mundial de la porcelana, donde se encontraban los antiguos hornos imperiales, pudimos descubrir un centro-museo “Ancient Kiln & Folk Customs Museum” y talleres con demostraciones dónde se repiten gestos ancestrales y se pueden admirar todas las etapas de la fabricación de este famoso “oro blanco”.
Un barrio con numerosos talleres de obras monumentales y pequeñitas.
El distrito de Tao Xi Chuan y su Ceramic Art Avenue (Avenida de arte cerámica) revaloriza el patrimonio industrial reconvirtiendo antiguas fábricas de porcelana en talleres, galerías, hoteles y restaurantes.
En Jingdezhen, la artista china Caroline Cheng (1963) dirige The Pottery Workshop (El Taller de Cerámica), un barrio revitalizado con la instalación de un complejo que comprende una escuela, talleres, tiendas de cerámica y cafés.
También visitamos The Opposite Studio, un taller y residencia de artistas en Sanbao, un pueblo en las cercanías de Jingdezhen, donde la dinámica y acogedora Sky pone todo a punto para que los diseñadores y ceramistas logren realizar sus proyectos. Allí vimos algunas obras de artistas europeos como François Ruegg (1954) y extranjeros. El artista colaboró con este taller para realizar una serie de obras que fueron expuestas en el Museo Ariana en Ginebra, Suiza en 2017. ()
Las teteras de Yxing
Las legendarias teteras en gres rojo de Yixing (provincia de Jiangsu), producidas desde el siglo XVI, se distinguen por su pequeño tamaño. Hoy en día se venden en precios astronómicos para coleccionistas, pero también se consiguen modelos a un precio módico, incluso en distribuidores automáticos dentro de los hoteles: otro ejemplo de la extrema modernización china.
Un concurso y exposición mundial de teteras constaba con la participación de la Academia Internacional de Cerámica (AIC), y de ceramistas como Jacques Kaufmann, Oriol Calvo-Vergés, Ming Wu y artistas chinos e internacionales.
El ejército de terracota de Xian
¿Qué decir de la llegada al primero de los numerosos y gigantescos hangares cerca de la ciudad de Xian (provincia de Shaanxi)? En aquellas fosas excavadas se encuentra el famoso e imponente ejército de terracota del mausoleo de Qin Shi Huangdi (259 antes de J.-C. –210 antes de. J.-C), primer emperador de China, con miles de guerreros de pie o arrodillados y sus caballos. Todos fueron hechos con varios moldes, pero sus rostros con rasgos individualizados tienen una expresión viva y única. Algunas estatuas están en perfecto estado, otras en pedazos, muchas han sido restauradas y otras están en proceso de restauración. Descubierto de manera fortuita en los años setenta, el sitio arqueológico fue declarado Patrimonio de la humanidad por la UNESCO en 1987. El ejército reproducido en terracota tenía que acompañar al difunto emperador en el más allá para toda la eternida. Réplicas y originales de los mundialmente famosos guerreros de terracota han viajado a través del mundo para ser expuestos en Berna (Suiza), Madrid y otras ciudades. El museo de Xian también conserva tesoros de orfebrería y otras hermosas esculturas de terracota.
Beijing y la figura de Mao
La figura de Mao Tse Tung (1893-1976), también conocido como Camarada Mao, nos acompañó a lo largo de nuestro viaje: esculturas y vajilla en porcelana con su efigie.
Para terminar…
La cerámica China ha tenido una extraordinaria influencia a nivel mundial tanto en Oriente como en Occidente a lo largo de la historia. Hoy sigue más viva que nunca a través de la obra de artesanos y artistas que perpetúan gestos milenarios o innovan, en búsqueda de nuevas maneras de expresarse con este arte fabuloso que es la cerámica.
Ana Quintero-Pérez es colaboradora científica del Museo Ariana de Ginebra y comisaria de exposiciones.
Mensaje de Wladimir Vivas:
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Wladimir Vivas
Director de Infocerámica
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