Internet, como herramienta ya insustituible de comunicación, está demostrado su utilidad también en la organización de asociaciones; es más, existen y están demostrando su funcionalidad las asociaciones que trabajan directamente en Internet.
Artículo de Wladimir Vivas para Revista Cerámica, Nº 135, sección Internet
A diferencia de las obras musicales o literarias, que pueden “viajar” por Internet, en sectores como la cerámica siempre será necesario ver, tocar, comprar o vender, hacer cocciones, exposiciones, cursos o comprar materiales. Tradicionalmente estas actividades paralelas han estado, en cierto modo, cubiertas o promovidas por las asociaciones, que se encargan de la organización de eventos, reuniones, cursos, ferias o exposiciones. Es evidente que esas actividades se deben seguir haciendo y que esas asociaciones son las más indicadas para hacerlo, dada la habitual cercanía y contacto personal, aunque ahora cuenten con otros recursos novedosos.
Desde la popularización de Internet, la mayoría de las asociaciones intentaron, con desigual suerte, la implementación de herramientas digitales: páginas web, foros, publicaciones o blogs, entre otras. Estas utilísimas aportaciones precisan de una dedicación constante, y quizá ese sea el problema por el que, en algunos casos, las páginas web de las asociaciones han terminado por languidecer, faltas de visitas, de renovaciones tecnológicas y, como consecuencia, faltas también de utilidad para los usuarios.
Desde hace tiempo, y casi como una continuación natural, se ha visto como algunas asociaciones se han ido convirtiendo en clubs virtuales, dos ejemplos muy claros, del mundo de la escultura, son el ISC (International Sculpture Center), de Estados Unidos, cuya página web (www.sculpture.org) se convirtió en algo más que un simple “tablón de anuncios” de la comunidad, siendo ahora el nexo de unión de escultores de todo el mundo, que lógicamente no tienen acceso a los eventos en vivo que organiza este centro, pero sí pueden disfrutar de los servicios que les provee la asociación en el mundo digital.
Otro ejemplo es la plataforma Sculpture Network (www.sculpture-network.org), que se fundó en Europa a imagen del ISC y que actualmente agrupa a miles de escultores.
Estas dos plataformas utilizan Internet como vehículo para desarrollar sus actividades, las puramente digitales son importantísimas, como los directorios de artistas, recursos, instituciones, etc, o la posibilidad de ponerse en contacto con otros agentes para la organización de eventos, reuniones, congresos cursos o exposiciones, esta vez sí, en el “mundo real”.
Estas plataformas aportan además algo de lo que carecen las redes sociales y que se está demostrando cada vez más importante: la profesionalización de quienes manejan estas herramientas de comunicación, lo que ha tenido como consecuencia que la “sección” digital de estas asociaciones sea cada vez más importante, si no imprescindible, para dar sentido a la asociación misma.
Que Internet ha democratizado el acceso a la información es evidente; que ofrece la posibilidad también de publicarla, por ejemplo en Facebook, y que sea vista por miles de personas, es el día a día de muchos ceramistas. Pero que esa información no se pierda entre otras miles, que se redacte bien y, sobre todo, que se tenga la seguridad de que habrá una continuidad en los contenidos, son algunos de los detalles que marcan la diferencia y que nunca se podrán exigir a quienes comparten información solo por placer..
Wladimir Vivas. Revista Cerámica, número 135 (diciembre, 2014)
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